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¿Te has preguntado alguna vez sobre la revolucionaria alimentación fotónica?
La alimentación fotónica es una práctica que se basa en la idea de consumir alimentos con un alto contenido de energía luminosa, como frutas y verduras frescas y crudas, para mejorar la salud y el bienestar.
En este emocionante viaje, descubriremos cómo la luz, ese elemento fundamental para nuestra salud, puede transformar la forma en que vivimos y nos alimentamos. Prepárate para una lectura reveladora.
La alimentación fotónica se basa en la premisa de que la luz es la fuente de vida, y abarca mucho más que la nutrición. La luz es la chispa que desencadena una multitud de funciones vitales en nuestro cuerpo. Pero, ¿sabías que también impacta a nivel de las plantas, minerales y animales?
Imagina un mundo donde la alimentación fotónica guía nuestras elecciones alimenticias. Donde consumir frutas y verduras en su estado crudo es clave para nuestro bienestar. Este enfoque se relaciona con la quinta dimensión, una dimensión de consciencia emergente que nos está llevando a la nueva consciencia.
Nuestro cuerpo está experimentando un cambio molecular y de ADN mientras dejamos atrás gradualmente el antiguo elemento carbono, de a poco. El carbono metaboliza energía de forma limitada, pero al dar paso al silicio, un cristal cargado con la energía directa del sol, permitiremos que la alimentación fotónica satisfaga nuestras necesidades.
En la actualidad, cargamos energía a través de micro y macronutrientes debido al carbono que compone nuestro cuerpo biológico.
Los alimentos fotonizados son aquellos que han sido bañados en la luz solar, como las plantas y cultivos terrestres. Al consumir estos alimentos, nos cargamos de energía fotónica, alciática o energía taquionica**; alimentando todos los aspectos de nuestro ser, desde lo físico hasta lo emocional y espiritual.
Un dato curioso: ¿Has escuchado acerca de las recientes ondas solares que están llegando a nuestro planeta? Estamos experimentando cambios en la frecuencia energética que nos preparan para un futuro en el que vibraremos a 100/160 herzios de voltaje. Actualmente, estamos alrededor del 7,7; 8 o 9 para aquellos que están mas elevados de frecuencia vibracional.
**Nuestro cuerpo humano está compuesto de energía eléctrica, magnética y de taquión (sutilmente). La energía taquionica, también se conoce como Prana, Chi, Energías de la Fuerza de Vida Universal, Aura, entre otros nombres alrededor del mundo . Nuestros cuerpos no solo son sensibles a la energía del taquión, sino que están equilibrados energéticamente.
La palabra taquión (griego) se traduce como ‘partícula rápida’. Se supone que esta energía es más rápida que la velocidad de la luz y se deriva de la palabra ‘taquitis’ (velocidad).
Los taquiones son unas partículas subatómicas que viajan más rápido que la luz. Esas partículas que infunden en la materia física con luz espiritual. La energía del taquión fue definida por el Dr. Gerald Feinberg de MIT en 1966 como una partícula subatómica más rápida que la luz.
Fuente: Energiasae.com
Las verduras se convierten en nuestros limpiadores y constructores corporales, mientras que las frutas son auténticos regalos del sol, colectores de su luz condensada. La energía solar, cuando llega a nosotros a través de los alimentos, se desvanece si estos alimentos son procesados o provienen de animales.
Los alimentos crudos nos transmiten la energía bioeléctrica del sol de manera directa y potencian cada célula de nuestro cuerpo, mejorando nuestra salud y vitalidad. Estas células actúan como conductos de luz solar.
En 1984, el Dr. Popp reveló la existencia de los biofotones, emisiones ultradébiles de fotones en los sistemas vivos. El ADN es una fuente principal de estas emisiones, y las plantas almacenan esta energía bioeléctrica a través de la fotosíntesis. Parece que el 97% del ADN está lleno de áreas llamadas entrans, que emiten esta emisión de fotones, y solo el 3% está lleno de información genética.
La emisión de fotones puede verse influenciada por casi cualquier agente. Las células muertas no tienen ninguna actividad de biofotones.
Los alimentos orgánicos silvestres emiten el doble de biofotones que los orgánicos y, cinco veces más que los comerciales. La cocción y la irradiación reducen esta energía vital. Cuantos más alimentos ricos en biofotones consumas, mayor será tu salud, vitalidad y longevidad.
Recuerda, sin luz no hay salud. Los biofotones parecen ser importantes en la regulación de todos los procesos metabólicos del cuerpo. Este hallazgo respalda al Dr. Bircher-Benner, quien a principios de siglo llamó a la luz en nuestros alimentos; el factor vital más importante.
En resumen, la alimentación fotónica es el camino hacia una vida más saludable y vibrante. Esto significa que la calidad de nuestros alimentos depende de la cantidad de energía luminosa que se haya almacenado.
¡Lleva la energía luminosa a tus células a través de alimentos vivos ricos en biofotones y goza de una bendecida y equilibrada salud!
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Soy Flor, Coach en salud nutricional integral y lectora de Registros Akáshicos en MF MINDFUL.
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